Control Prenatal (2a Parte)

EL EMBARAZO NO ES UNA ENFERMEDAD, ES UN ESTADO NORMAL DE LA MUJER, PERO QUE REQUIERE ALGUNOS CUIDADOS Y VIGILANCIA PARA LLEGAR A UN FINAL FELIZ PARA LA MAMA Y EL BEBE.

Un bebé sano y una pareja feliz es el deseo de todo ginecólogo a cargo del cuidado de un embarazo, acude a tu control prenatal con regularidad.

La semana anterior comentamos sobre la importancia de un buen control prenatal, por medio del cual se pueden evitar un sinnúmero de problemas para la mamá y el bebé, decíamos que este control debe ser mensual y al final del embarazo quincenal o incluso semanal de acuerdo a la evolución del mismo embarazo.

Con un adecuado control prenatal podemos detectar enfermedades desde el principio del embarazo, se puede detectar inicialmente si el embarazo esta bien ubicado en la matriz o existe un embarazo extrauterino, esto por medio del ultrasonido, también podemos detectar algunas causas de la amenaza de aborto como la implantación baja de la placenta, podemos tratar tempranamente dichos problemas por medio de medicamentos y cuidados.

Otra problema frecuente en el embarazo son las infecciones vaginales ya sea por hongos o por bacterias que son comunes en esta etapa, si se tratan oportunamente no habrá mayor repercusión, pero de no hacerlo pueden llevar a problemas mayores como una amenaza de parto pretérmino (parto prematuro) o una ruptura prematura de membranas (cuando se rompe la fuente), con el consecuente mayor riesgo para el bebé. Lo mismo se puede decir de las infecciones de vías urinarias que son frecuentes durante el embarazo y que también acarrean los problemas mencionados, es tan sencillo diagnosticarlas y tratarlas que es una lástima que siga siendo importante el número de bebes prematuros por esta causa y todo por una falta de control prenatal adecuado.

Es cierto que la mujer embarazada gordita se ve muy bonita y es una etapa en que nadie les dice nada por aumentar de peso, al contrario todo el mudo (esposo, mamá, amigas, etc.) se preocupa por que coma bien y a veces de más, sin embargo el control de peso es importante, lo ideal es que no sea más, ni menos el incremento durante el embarazo, el cual debe ser entre 9 y 12 kilogramos, es decir de un kilogramo a uno y medio por mes, si la mujer no come adecuadamente y se queda por debajo de este peso corre el riesgo de tener un bebe con bajo peso y esto para el bebé puede ser delicado, por otro lado un incremento excesivo de peso puede coadyuvar a problemas como bebes muy grandes (les llamamos macrosómicos) de más de 4 kgr.,los cuales pueden tener dificultad para nacer por vía vaginal y pueden también tener problemas con su control de la glucosa al nacimiento por lo que requieren mayor cuidado. El incremento exagerado del peso traerá mayores molestias en el embarazo por el peso mismo, alteraciones a nivel de las venas en las piernas (varices), molestias a nivel de la espalda baja, mayor fatiga durante los últimos meses y en ocasiones problemas con el control de la presión arterial (preeclampsia). Una mala dieta puede ser un factor en la aparición de problemas como la diabetes gestacional o del embarazo.

Mediante un buen control prenatal podemos detectar estas 2 últimas enfermedades o complicaciones del embarazo que aún siguen siendo graves, la preeclampsia en particular (enfermedad del embarazo en la que sube la presión arterial, se hinchan los pies las manos y la cara) es todavía la primer causa de mortalidad materna en el país, y es un hecho perfectamente establecido que este problema tiene menor repercusión en la madre y el bebé con un buen control prenatal, de hecho es mucho menos frecuente su aparición entre las madres que llevaron control prenatal que en las que no acudieron regularmente a su médico.

En la próxima semana continuaremos comentando sobre cuidados del embarazo.

 

Dr. Daniel Saldívar Garza