Hola os voy a contar la historia de cómo mi prima me hizo su esclavo y me obligo a servirla y obedecer a ella y a sus amigas.

Hola os voy a contar la historia de cómo mi prima me hizo su esclavo y me obligo a servirla y obedecer a ella y a sus amigas.

Todo comenzó una tarde de verano en la que fui a su casa para verla, puesto que hacía ya algún tiempo que no la veía. Mi prima se llama Paloma, no es muy alta, morena y está bastante bien de cuerpo, tiene 21 años y vive en alicante. Estuve hablando con ella cuando le dije que si quería un masaje, ella me dijo que sí, le quité sus sandalias y le empecé a masajear sus pies, no tenia las uñas pintadas, estuve haciéndole masajes en los pies durante una hora, yo tumbado en el suelo con su pie sobre mi cara a una 7 cm de altura, ella estaba sentada usando el ordenador, me dijo que iba a salir por la noche así que me ofrecí a pintarle las uñas, ella accedió, pasaba un poco de mi pero yo era muy feliz sirviéndola, cuando me pedía algo yo dejaba sus pies cuidadosamente sobre un cojín e iba corriendo a hacer lo que me pidiese, traerla el teléfono, un vaso de agua…

Cuando acabé de pintarle las uñas le continúe masajeando los pies, no aguantaba más, creo que ella noto el bulto en el pantalón y me dijo: “¿Qué te parece si fueras mi esclavo durante una semana?” yo le dije que no sabía, no quería parecer desperrado pero acabe aceptando, nada mas eso le bese los pies y los apreté contra mi cara, ella me dió una gran bofetada que me echo hacia detrás y me dijo:

-“¿Qué haces esclavo asqueroso? ¿Quién te ha dado permiso para besarme los pies?”

Acto seguido me abrió la boca con las manos y me escupió, me dijo que le diese besos suaves y pautados por todos sus pies y las piernas sin pasar de las rodillas, mientras yo obedecía sus órdenes ella estaban hablando por teléfono, la oí decir que viniesen esta noche a su casa.

Por la noche ella iba vestida con un vestido que parecía una diosa griega, sus sandalias y sus uñas pintadas de rojo pasión. Llamaron a la puerta y eran dos amigas suyas, una se llamaba Amy y la otra Beatriz, las abrí, una iba vestida como si fuese egipcia, sus padres eran egipcios y se parecía a Cleopatra, tenía las uñas pintadas de rosa. La otra amiga iba vestida con unos vaqueros ajustados y zapatos de tacón. Mi prima las hizo pasar al salón y me ordenó que les trajese una botella de vino y tres copas, yo desde la cocina oía risas, cuando llegue las serví las copas y  mi prima me hizo arrodillarme, al principio me entro vergüenza pero luego se me paso, me hizo quitarme la camiseta, Amy me agarró la cara y me dijo:

“Ya me ha contado tu prima que eres su esclavo, sabes también vas a ser el nuestro ¿Qué te parece?”

Yo respondí me parece bien Amy. Me soltó una bofetada y me dijo:

“A partir de ahora nos llamaras reinas, diosas o amas seguido de nuestro nombre, estarás siempre a nuestros pies , no hablaras a no ser que te preguntemos y podremos hacer contigo lo que queramos, ya que no eres más que un juguete nuestro, ¿Entendido esclavo?”

“Si mi diosa Amy”

Al ver esto mi prima y mi diosa Bea se empezaron a reír. Mi prima sacó de un armario un látigo, Mis diosas Amy y Bea me ataron a las patas de una mesa de tal forma que yo quede a 4 patas como el perro que era, mi prima me empezó a azotar bastante fuerte, se fueron pasando el látigo durante un rato hasta que empecé a sangrar, entonces me ordenaron que trajese un cuenco con unas uvas, un plátano y un vaso con una botella de agua. Se sentaron en el sofá, pusieron el cuenco a sus pies y empezaron a estrujar las uvas hasta que quedaron muy aplastadas, lo mismo hicieron con el plátano, cada una bebió un poco de la botella y se enjuagaron la boca con el agua, después escupieron el agua todas en el vaso y me dijeron que esa iba a ser mi cena, yo rápidamente les bese los pies para darles las gracias y me puse a comer mi rica cena mientras me daban algún que otro latigazo y se burlaban de mi.

Cuando acabe limpie mi plato y volví al salón, al parecer se iban a divertirse más conmigo.

“Ahora vas a quitarnos los zapatos, vas a olernos los pies hasta que te ordenemos y vas a darnos un masaje a cada una” me dijo mi prima, empecé quitándole las sandalias a mi prima, cuando las fui a dejar en el suelo sentí un fuerte latigazo en la espalda,

“maldito esclavo, ¿pensabas dejar la sandalia sin olerla y chupar la suela hasta que reluciera?” me dijo mi diosa Bea, escupió en la sandalia de mi prima y me dijo lame ahora cerdo asqueroso, Yo la dije si mi reina, perdóname por ser tan inútil y ella se empezó a reír.

Cuando acabe de limpiarle todos los zapatos y los pies a mis reinas me dejaron ir a curar las heridas de la espalda, había hecho todo eso mientras me daban mas latigazos, me escupían y se reían constantemente de mí , me lleve alguna patada en mis partes por intentar chupar sus maravillosos dedos, me decían que si no había entendido bien la orden, que solo me permitían oler y masajear sus pies, cuando acabe de limpiarme las heridas  Amy  que iba vestida igual que Cleopatra me ordeno ponerle los zapatos a todas, se subió encima de mí y me empezó a aplastar la polla saltando encima de ella, yo gritaba y mientras mi prima y mi diosa Bea me daban patadas por el costado, en las partes y me daban latigazos en el pecho diciéndome que me callase, que no era más que su esclavo, un juguete del que se olvidarían pronto.

Cuando mi diosa Amy se cansó se subió mi prima, estuvo apretando sus pies contra mi cuello a mi me costaba respirar a ella le daba igual saltaba sobre mi cuello para hacerme más daño, era como si yo no existiera les daba igual que me muriera, no era más que su esclavo. Al acabar mi prima se subió encima de mí mi diosa Bea, ella que llevaba zapatos de tacón se aprovecho y me clavaba los tacones por todo mi cuerpo, yo no había sentido tanto dolor en mi vida, le pedí que si podía parar ella me ignoro y me clavo los tacones cada vez mas fuertes hasta que mi prima dijo

“¿Qué os parece si sacamos a nuestro perro a dar un paseo?” cuando dijo esto serian las 2 de la mañana, había estado sirviéndolas durante unas 3 horas. Me pusieron una correa y bajamos a la calle, según íbamos paseando me daban latigazos o patadas para que fuese más deprisa, a mi me dolía pues iba a 4 patas y desnudo. En un momento nos cruzamos con un grupo de chicas de su edad que al verme se empezaron a reír, mi prima les dijo que era su esclavo, que si querían unirse a las fiesta, ellas eran 4 y riéndose dijeron que si, me ordenaron tumbarme en medio de la calle mientras empezaron a pisarme y a saltar sobre mí a todo esto mi diosas me escupían de vez en cuando y daban patadas, al ver esto ellas también quisieron escupirme y me tuve que tragar como 30 escupitajos de ellas, estaban muy ricos, yo les besaba los pies para darles las gracias, se sentaron en un banco y se pusieron de espaldas, de tal forma que quedaban hacia mí las suelas de sus zapatos, me ordenaron limpiarles todos los zapatos, yo empecé rápidamente a complacer a las que por unas horas se convirtieron en mis reinas también, debido a que mis amas se habían ido de fiesta y me habían dicho que cuando mis nuevas diosas hubieran quedado satisfechas conmigo me fuera a casa, siempre a 4 patas como el perro el que era.

Al acabar de limpiar los zapatos de aquellas chicas una se quito el zapato y pude verle el pie, era un pie precioso con un arco que me entraron ganas de besar, unos dedos pequeñitos y unas uñas pintadas de un color azul eléctrico, al verle el pie la polla se me puso dura en un momento, otra de las chicas me la agarro y empezó a apretarla y me decía no te vas a correr hasta que te lo digamos, como lo hagas te castigaremos severamente. Yo la respondí si mi reina. La chica que se había quitado el zapato me metió el pie en la boca todo lo que pudo y me dijo chúpame el pie esclavo, quiero que me masajees los dedos con tu lengua, mientras le chupaba el pie con la lengua las demás chicas se reían de mi, de vez en cuando me entraban ahorcadas ya que tenía más de medio pie suyo dentro de mi boca. Una vez que quedo satisfecha empezó con el otro pie y así todas las chicas, cuando acabe me abofetearon, me empezaron a dar patadas y a escupir en la boca durante unos 5 minutos, cuando se cansaron me dijeron esta es tu recompensa por haber trabajado bien esclavo ahora puedes irte a casa con tus amas y dalas las gracias por habernos dejado jugar contigo.

Llegue a casa a las 7 de la mañana, al entrar en casa me fui a la habitación de mi prima y me dormí a los pies de la cama, me habían dicho que como un perro no tenía derecho a dormir en una cama.

Me estaba ahogando cuando me desperté, era mi prima que me había metido el pie en la boca y me estaba tapando la nariz con la mano cuando me dijo levanta inútil no tienes derecho a dormir, rápido sírveme el desayuno, yo corriendo le traje en una bandeja un zumo y unas tostadas a mi prima, se lo dí y me dijo que le hiciese un masaje en los pies mientras desayunaba, cuando terminó me dijo que la acompañara a la ducha,  se desnudó y me hizo entrar a la ducha y me dijo: ponte a mis pies a cuatro patas, te lavaras con el agua que caiga de mi cuerpo, ¿entendido?

Yo asentí con la cabeza, ya que si hablaba me castigaría. La seque con una toalla y me fui a vestir, habíamos quedado con Amy y Bea en una cafetería a las 12. Cojí el coche y lleve a mi prima hasta la cafetería, la abrí la puerta del coche y la seguí por detrás siempre mirando sus pies, mi prima al entrar las vio sentadas en un apartado que habían reservado, la cafetería estaba casi vacía, solo había una pareja en una esquina a la cual no podíamos ver por la distribución  del local y dos señoras de unos 30 años pero estaban bastante bien físicamente, una era morena bastante alta y se notaba que había estado tomando el sol, llevaba unas sandalias que tenían arena, la otra era un poco mas bajita y morena también, llevaba unas bailarinas color ocre con chapitas de metal y estaban bastante sucias, al entrar en la cafetería me puse la correa de perro que me dió mi prima y la seguí a 4 patas hasta la mesa en la que estaban sus amigas, me recibieron con una patada, yo las bese los pies para darlas las gracias. Yo estaba debajo de la mesa oliendo sus pies mientras ellas hablaban, de vez en cuando me daban patadas y las oía reírse. Cuando llegó la camarera les pregunto qué querían. Ellas pidieron unos batidos para ella y le pidieron un cuenco de perro y un gofre con chocolate, la camarera les preguntó que para que querían el cuenco de perro, ellas riéndose señalaron hacia mí que me encontraba debajo de la mesa y me dijeron bésale los pies a la camarera, yo lo hice y dijo mi diosa Bea si puedes escupir varias veces sobre un vaso y traérnoslo te lo agradeceríamos.

Pasado un tiempo volvió la camarera con todo y se fue, yo seguí como si nada debajo de la mesa atendiendo los pies de mis amas, cuando paso un rato me pusieron el vaso con agua que estaba lleno de escupitajos de la camarera y de ellas y me hicieron  beberlo todo, al acabar tiraron el trozo de gofre con chocolate a los pies de las chicas de 30 años y me dijeron que las preguntase si podía oler, besar, chupar y comer de sus pies. En ese momento se me revolvió el pecho de vergüenza pero acabé yendo .

Cuando llegué y les pregunté todo eso, ellas se empezaron a reír, después de un rato burlándose de mi dijeron que no había ningún problema, justo cuando me disponía a limpiarle los zapatos pisó el gofre llenando su zapato y el de su amiga de chocolate y agarrándome de los pelos me dijo como vea que no has lamido bien nuestros zapatos se lo vamos a decir a tus amas para que te castiguen. Yo procure dejar los zapatos lo más limpio posible y cuando acabé les quite los zapatos y empecé a inhalar el rico aroma que desprendían sus zapatos, las bailarinas olían a gloria, estuve como 5 minutos en el suelo con mi nariz dentro del zapato y mis amas decían: “mira como olisquea como un perro” y se reían. Cuando acabé de oler los zapatos les empecé a besar suavemente los pies, las dos tenían las uñas pintadas y unos pies bastante bonitos, después de haber estado lamiendo durante un buen rato sus pies sentí un latigazo en la espalda, era mi prima, me dijo que nos íbamos a comer a un restaurante, que las siguiese.

Al llegar al restaurante pidieron su comida y un plato aparte, cuando el camarero trajo la comida pusieron mi plato a sus pies y me tiraban las sobras al plato, cuando acabaron de comer empezaron a pisar las sobras con sus zapatos,

” Antes de dejarte comer te vamos a echar condimento, ya verás que rico va a estar jajaja” dijo mi ama Amy.

Acto seguido empezaron a escupir en el plato, yo mientras les limpié los zapatos que se habían ensuciado por culpa de mi comida, eso me habían dicho ellas y me lleve un buen par de patadas en mis partes por esto. Cuando acabé de lamer el plato tiraron de la correa y nos fuimos. Cuando llegamos a casa me ataron a un árbol y me empezaron a clavar en el culo y la espalda los tacones, luego me dieron algún que otro latigazo me desataron y me dijeron, sabes nos apetece jugar un rato a la pelota, yo no entendía que debía hacer, me dispuse a entrar en casa a buscar alguna pelota pero sentí un latigazo y pude oír, “no esclavo, la pelota eres tú” se rieron de mí y me golpearon en las partes durante una media hora, acabe exhausto en el suelo no aguantaba más el dolor pero a ellas no las importaba, al fin y al cabo no era más que un juguete.

Llegó la noche y seguían pegándome, hacia las 9 se fueron a cenar y me dejaron en el jardín desnudo y atado con la correa a un árbol como a un perro, no se preocuparon por mí hasta la mañana siguiente, la cual me despertaron con un cubo de agua fría y unos latigazos. Ese día lo pase limpiando la casa, pues al parecer habían dado una fiesta con otras amigas y habían dejado la casa hecha una mierda, ellas salieron, no se a donde, es una cosa que no debe importarme me dijeron mis amas. Por la noche cuando llegaron les tenía preparada la cena, ellas me lo agradecieron, no me pegaron al verme, parecía como si me estuviesen cogiendo cariño. Yo llevaba un día y medio sin comer, pero les dio igual me ignoraron como si nada, ese día durmieron mi prima y mi ama Amy en la misma cama, Bea se había ido a ver a su novio, asique yo estaba solo con mis dos amas, se portaron bien conmigo, no me dejaron dormir en el jardín, me obligaron a meterme debajo de colchón y ellas se tumbaron encima, me dolía mucho tener que soportar el peso de las dos, pero era mi deber no quejarme, al día siguiente me desperté al sentir varios golpes fuertes, me estaban dando con una tabla a través del colchón. Cuando Salí vi que además de mis dos diosas había una tercera, era la camarera de aquella cafetería, se llamaba Marta al parecer ella también había tratado con esclavos alguna vez y le gusté, llamó a mi prima y le dijo que si podía dominarme también, que sabia algunos castigos con los que se iban a divertir. Las tres venían de haber salido a correr y tenían los pies sudados. Al verme mi ama Marta me agarró mis partes con bastante fuerza y cuando abrí la boca para gritar me escupió y dándome una bofetada me dijo que ni se me ocurriese gritar si no quería recibir un castigo. Mi ama Amy había alquilado una película, mientras mi ama Amy ponía la película mi prima y mi ama Marta me metieron sus calcetines sudados en la boca, me pusieron las zapatillas con las que habían corrido en la nariz y me lo sujetaron con una cuerda, todo quedó de tal modo que solo podía oler las zapatillas que olían a sudor y saborear el delicioso sabor a sudor de los pies de mis amas, las tres se sentaron en el sofá a verla y me dijeron que me quedase a cuatro patas para que pudieran apoyar sus pies sobre mi espalda. La  película duró unas 2 horas, cuando acabó me quitaron los calcetines de la boca y las zapatillas de la cara, aun así yo seguía teniendo el sabor a sudor en la boca y en la nariz lo olí durante unos 20 minutos.

A la hora de comer yo estaba atado a la puerta de casa, toda la gente que pasaba me miraba y se reía para mi suerte pasaron solo 3 grupos de chicas, uno de los cuales era el que dos días antes habían estado jugando conmigo en la calle por la noche, ellas se pararon a jugar conmigo, solo que hoy solo iban dos y parecían de muy mal humor, me cogieron la correa y la pasaron a través de una valla, solo pasaba la correa, mi cabeza no, ellas tiraron de la correa y me ahogaban, hubo un momento en el que me empecé a marear y perdí el conocimiento, me desperté a los 20 minutos, era la chica rubia que me estaba metiendo el pie en la boca, aun habiéndome desmayado ellas seguían humillándome era increíble. Poco tiempo después de esto se cansaron y llamaron a casa de mi prima, salió mi prima y se dieron dos besos, ella le dijo que si algún otro día quería liberar su rabia o no sabía qué hacer que vienera a casa que yo estaría para que me humillaran.

Cuando se fueron mi ama Marta se quedo conmigo para amaestrarme mejor, mi prima y mi ama Amy se fueron descalzas a dar una vuelta. Cuando se fueron mi ama Marta dijo que iba a saber lo que era el infierno como no aprendiese rápido y la obedeciera en todo.

“1º lección esclavo, siempre que nos veas nos llamaras amas. ¿Entendido?”

“Sí mi ama Marta.”

“Bien, 2º lección cuando nos veas te acercaras a nosotros y nos saludaras besándonos los pies hasta que te demos una pequeña patada en la cara para que pares”

Cuando acabó yo le bese los pies hasta que me dió una patada muy fuerte que me tumbó

“Perdona esclavo pensé que era un perro que me estaba lamiendo jajaja. Sigamos 3º lección No te dirigirás a nosotras tus amas a no ser que te preguntemos y ni se te ocurra hablarnos sin permiso”
“Si mi ama.”
“1º error, vas a ser castigado para que aprendas a obedecer lo que tus amas te dicen”

A todo esto mi ama Marta me ato a la mesa, me puso una pinza en la nariz y me tapó los agujero  de la nariz con bastante celo para que no respirara por si acaso, se sentó en mi pecho e introdujo su precioso pie en el interior de mi boca, lo introdujo tanto que yo me resiste por las ahorcadas ella me sujeto la cabeza y me dio una par de bofetadas hasta que me estuve quieto, saco su pie y me dijo: voy a hacer esto 5 veces más, meteré mi pie en tu boca durante 45 segundos lo sacare y te daré 10 segundos para que cojas aire, si te desmayas o te resistes serás castigado mucho más duramente ¿entendido?

“Si mi ama Marta, tus deseos son ordenes para mi”

“Bien esclavo, veo que vas aprendiendo”

Cumplí el castigo que mi ama me había impuesto y cuando acabe yo no podía mas, casi no podía respirar.

“Bueno esclavo estas son las 3 lecciones que no deberás olvidar si no quieres ser castigado, ahora vas a limpiar la casa y preparas la cena a tus amas para cuando vuelvan”

Mi ama Marta se despidió de mí con una patada en mis partes, yo quede en el suelo tendido de dolor y atado a la puerta. Cuando llegaron mi prima y mi ama Amy traían los pies verdaderamente sucios, estaban negros de haber estado andando todo el día descalzas, me agarraron la cabeza y me restregaron la cara por sus pies, re rieron de mí y mientras cenaban viendo la tele yo tuve que lamer sus pies para dejárselos como nuevos. Pasaron unas 2 horas cuando por fin acabe, se fueron a la cama y me sacaron al jardín, me ataron al árbol y pusieron el aspersor toda la noche mojándome a mí.

Esa noche no dormí casi nada, entre el frio de estar mojado y el agua golpeándome el cuerpo me costó mucho poder dormir, apagaron el aspersor una vez que se levantaron y burlándose de mi me preguntaban cómo había pasado la noche, yo les dije “muy bien amas, gracias por haberme estado mojando durante toda la noche” cuando acabe les bese los pies tal y como mi ama Marta me había indicado. Ese mismo día llegó mi ama Bea a la que había estado sin ver durante 3 días, era la que mejor se portaba conmigo asique cuando entro por la puerta me tire como un perro a sus pies y se los empezó a lamer hasta que me dio una patada y me dijo que había echado de menos humillarme, pegarme patadas, latigazos, escupir, darme de comer de sus pies, todo esto lo dijo en tono burlón mientras se reía de mi viéndome en el suelo y lleno de moratones y cicatrices. Se sentó en el sofá y dijo que me había comprado un regalo, saco de una bolsa un bozal de perro, una correa con una chapa que ponía esclavo y un aparato para mis partes que decía que si me portaba mal soltaba pequeñas descargas eléctricas (este gracias a dios solo lo usaron en 2 ocasiones conmigo por haber hecho una estupidez o eso me decían ellas). Mi prima quería estrenar los regalos que me había traído mi ama Bea, los cuales por supuesto debía pagar yo con mi dinero, me pusieron la correa y me llevaron de paseo hasta la cafetería en la que trabajaba mi ama Marta, no se alegro mucho de verme pues me recibió con una bofetada y me tiró un vaso de agua por encima, mi prima le contó lo que me había regalado mi ama Bea y decidió probar el aparato en mis partes, me trajo un vaso con agua y escupitajos de las 4 y me hizo beberlo usando la lengua, les bese los pies a todas durante 1 hora para darlas las gracias, estábamos en el apartado de la cafetería y no había gente, pues había cerrado durante 2 horas para divertirse con su esclavo, alguna vez mientras besaba los pies de mis amas usaban el mando y pulsando el botón recibía alguna descarga eléctrica, esto acabo haciéndome que me corriese , ellas no me castigaron puesto que llevaba una semana sin haberme corrido por sus órdenes. Ese día acabo mi semana como esclavo de mi prima, aunque yo le pedí de rodillas y delante de sus amigas que me siguieran teniendo como su esclavo. En alguna otra ocasión les contaré mas historias fetichistas mías. Gracias por haberlo leído, espero que les haya gustado y comenten por favor.

Aquí os dejo las fotos de mis amas.

Estos son los pies de mi ama Marta

Estos son los pies de mi prima

Estos son los pies de mi ama Amy.

Estos son los pies de mi ama Bea.

Acerca de esclavodemiprima

soy un esclavo. Me gusta servir a las mujeres y chuparlas los pies
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Una respuesta a Hola os voy a contar la historia de cómo mi prima me hizo su esclavo y me obligo a servirla y obedecer a ella y a sus amigas.

  1. santitan8 dijo:

    Falta que te vistan de mujer, te obliguen a chupar la polla y a ser la putita de el novio de tu àma´bea

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